Asistentes de voz y privacidad: una relación cada vez más delicada
Los asistentes de voz están presentes en millones de hogares y oficinas, donde cumplen funciones cotidianas como buscar información, agendar citas o controlar dispositivos inteligentes. Sin embargo, cada una de estas tareas conlleva un costo invisible: el manejo de tus datos personales. Según el informe de IEB School, el 50 % de las búsquedas en Internet ya se realizan por voz, tendencia que seguirá en ascenso.
El Instituto Nacional de Ciberseguridad (INCIBE) explica que estos dispositivos funcionan bajo un modelo de escucha pasiva constante, es decir, permanecen atentos todo el tiempo hasta que reconocen comandos como “Hey Siri”, “Alexa” o “Ok Google”. Una vez activados, procesan tu voz en la nube, lo cual mejora su precisión pero abre la puerta a múltiples vulnerabilidades digitales.
¿Escuchan más de lo necesario? Casos que despertaron alarmas
En 2019, un contratista filtró a medios belgas grabaciones realizadas por el Asistente de Google. Los audios incluían temas sensibles como direcciones privadas, consultas médicas y conversaciones familiares. Tras el escándalo, la Autoridad de Protección de Datos de Bélgica solicitó frenar temporalmente el análisis humano de estas grabaciones hasta garantizar mayores controles.
Un estudio conjunto del Instituto Max Planck y la Universidad Ruhr de Bochum analizó 11 dispositivos y detectó más de 1.000 activaciones accidentales, también conocidas como “falsos positivos”. Estas activaciones se producen sin que se pronuncie la palabra clave, generando registros involuntarios que ponen en riesgo la privacidad de los usuarios.
En redes sociales también se reportan casos como el de una criminóloga, quien denunció que su Alexa grabó conversaciones sin activación previa. Este tipo de experiencias refuerzan los temores sobre la intromisión silenciosa de estas tecnologías.
Cómo proteger tus datos al usar asistentes de voz
Según el INCIBE, la clave para proteger la privacidad está en la configuración. Entre las acciones más eficaces están:
- Desactivar el historial de grabaciones.
- Eliminar datos almacenados en la nube.
- Programar el borrado automático de comandos.
- Desactivar el micrófono cuando no se use.
- Activar el “modo invitado” para evitar registros permanentes.
Steven Vinueza, docente de la Escuela de Ciencias de la Computación de la UIDE, sostiene que las compañías sí ofrecen herramientas de protección, pero muchos usuarios las desconocen o no las activan. «Conocer y gestionar estas opciones es esencial para proteger la intimidad del hogar», señala.
Más funciones, más datos: el futuro de los asistentes de voz
Los dispositivos de asistencia virtual seguirán creciendo. Según proyecciones de IEB School, habrá más de 1.000 millones de dispositivos con asistentes integrados en los próximos años. Estarán presentes en vehículos, quirófanos, escuelas y hasta sistemas de seguridad.
Dag Kittlaus, cofundador de Siri, afirmó en la revista Inc. que el mayor riesgo no está en las empresas tecnológicas, sino en los posibles ataques de piratas informáticos que puedan acceder a las grabaciones o historiales de voz.
Frente a esta realidad, la comodidad que ofrecen estos dispositivos debe ir acompañada de una vigilancia consciente por parte de los usuarios. Saber qué canción pediste esta mañana es apenas la punta del iceberg; la verdadera pregunta es cuánta información entregas sin darte cuenta.
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Fuente: www.elcomercio.com
