El silencio de DeepSeek, uno de los mayores referentes de la inteligencia artificial china, se ha roto tras varios meses de ausencia pública. Su investigador jefe, Chen Deli, ha lanzado un mensaje inquietante sobre el impacto social y económico que podría tener la IA en los próximos años.
DeepSeek: un discurso que rompe con el optimismo oficial
Durante la Conferencia Mundial de Internet celebrada en Wuzhen, Chen afirmó ser optimista respecto a la tecnología, pero profundamente pesimista sobre su efecto en la sociedad. Es la primera vez que un representante de DeepSeek se pronuncia desde febrero, cuando su fundador se reunió con Xi Jinping tras el éxito mundial de su modelo R1.
Sus palabras contrastan con el discurso habitual del gobierno chino, que suele presentar la inteligencia artificial como símbolo de progreso y fortaleza nacional. Reconocer que la automatización podría afectar seriamente al empleo marca un cambio de tono significativo.

Una advertencia de DeepSeek desde el corazón de la innovación china
Chen compartió escenario con líderes de otras grandes empresas tecnológicas, conocidos en China como “los seis pequeños dragones” de la IA. Su diagnóstico fue claro: en menos de una década, la inteligencia artificial será capaz de sustituir una parte importante del trabajo humano, y en dos décadas podría asumir la mayoría de las tareas.
“La sociedad podría enfrentarse a un enorme desafío”, afirmó. “Las empresas tecnológicas deben asumir el papel de defensores y no solo de desarrolladores”.
De la euforia tecnológica a la precaución estratégica
Desde el lanzamiento de DeepSeek-R1, un modelo de código abierto que compitió con los líderes estadounidenses, la empresa había mantenido un perfil bajo. Ni su fundador ni otros representantes habían hecho declaraciones públicas, lo que hacía del mensaje de Chen un acontecimiento relevante.
Mientras tanto, DeepSeek ha continuado expandiendo su influencia dentro del ecosistema tecnológico chino. Empresas como Huawei y Cambricon ya han desarrollado hardware optimizado para sus modelos de IA, consolidando la posición de la firma como eje estratégico frente a las sanciones tecnológicas de Estados Unidos.
Un giro hacia la regulación global de la IA
El reciente discurso de Xi Jinping en el foro APEC, donde propuso la creación de un organismo internacional para regular la inteligencia artificial, coincide con la postura más prudente expresada por DeepSeek. Ambos mensajes sugieren que China está preparando una nueva narrativa: pasar del entusiasmo tecnológico a una regulación responsable y preventiva.
El reconocimiento del riesgo social que supone la automatización no solo marca una evolución en la estrategia de DeepSeek, sino también en la visión del gobierno sobre el futuro de la inteligencia artificial y su impacto en el empleo mundial.
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