El dron nodriza con 100 drones kamikaze: una nueva dimensión en la guerra aérea
El uso de vehículos aéreos no tripulados ha transformado la estrategia militar contemporánea. Desde el inicio del conflicto en Ucrania, donde los drones kamikaze han tenido un impacto decisivo, hasta las operaciones de inteligencia o vigilancia táctica, su protagonismo es indiscutible. En este contexto, China ha dado un paso más con el desarrollo del dron nodriza con 100 drones kamikaze, un sistema aéreo que podría redefinir el concepto de ataque en enjambre.
El Jiu Tian: plataforma estratégica de despliegue
Tal como informa el South China Morning Post, el modelo Jiu Tian —literalmente “cielo alto”— fue presentado por primera vez en el salón aeronáutico de Zhuhai en noviembre. Este dron nodriza con 100 drones kamikaze está diseñado para operar por encima del alcance de numerosos sistemas de defensa aérea de medio alcance. Su motor a reacción le otorga una autonomía estimada de 7.000 kilómetros, además de permitirle alcanzar los 15.000 metros de altitud. Por si fuera poco, su capacidad de carga es notable: hasta seis toneladas de munición o drones más pequeños.
El despliegue coordinado: saturación y control del espacio aéreo
La característica más disruptiva del dron nodriza con 100 drones kamikaze es precisamente su capacidad para lanzar decenas de unidades de ataque desde ambos lados de su fuselaje. Estas operaciones, conocidas como misiones en enjambre, permiten saturar los sistemas defensivos enemigos con múltiples objetivos coordinados. Según la emisora estatal CCTV, el primer vuelo de prueba está previsto para finales de junio, marcando el inicio de una etapa crucial de validación tecnológica.
Ingeniería modular y posibles aplicaciones civiles
Diseñado por AVIC y fabricado por una filial de Guangzhou Haige Communications, el Jiu Tian incorpora una arquitectura modular en su bahía de carga. Gracias a ello, el dron nodriza con 100 drones kamikaze puede adaptarse también a usos no bélicos: vigilancia marítima, defensa fronteriza, rescate en zonas remotas o protección de recursos naturales. Esta versatilidad lo posiciona como una herramienta multifuncional dentro del amplio espectro operativo del Ejército Popular de Liberación.
Un desafío a la hegemonía aérea occidental
Con un peso máximo de 16 toneladas y una envergadura de 25 metros, el dron nodriza con 100 drones kamikaze amplía la gama de UAV avanzados de China, como el CH-7 o el Wing Loong-X. Aunque sigue en fase de pruebas, su diseño apunta a rivalizar con modelos occidentales de prestigio, como el RQ-4 Global Hawk o el MQ-9 Reaper. En suma, China refuerza así su apuesta por un dominio estratégico del espacio aéreo mediante tecnología no tripulada de última generación.
Fuente: XATAKA
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