Ecuador tendrá que esperar hasta el 13 de abril de 2025 para conocer quién liderará el país en los próximos años. Los resultados de la primera vuelta de las elecciones presidenciales dejaron al actual mandatario, Daniel Noboa, y a la candidata de izquierda, Luisa González, como los dos principales contendientes en una reñida competencia que refleja la polarización política del país.
Con más del 80% de las actas escrutadas, Noboa alcanzó el 44,43% de los votos, mientras que González obtuvo un 44,17%. La diferencia de menos de 0,3 puntos porcentuales entre ambos refuerza la necesidad de una segunda vuelta para decidir el futuro de la Presidencia.
Por qué habrá una segunda vuelta
Según las leyes electorales de Ecuador, un candidato necesita superar el 50% de los votos o alcanzar al menos el 40% con una ventaja de 10 puntos sobre el segundo lugar para ganar en primera vuelta. Este escenario no se cumplió, dejando la decisión final en manos de los ecuatorianos en abril.
La jornada electoral del 10 de febrero estuvo marcada por una alta participación ciudadana, con más del 83% del padrón acudiendo a las urnas. En total, 13,73 millones de ciudadanos estaban habilitados para votar, distribuidos en más de 41.000 juntas receptoras del voto tanto en el país como en el extranjero.
Las reacciones de los candidatos
Mientras los resultados preliminares avanzaban, las posturas de los candidatos contrastaron notablemente. Luisa González, apadrinada por el expresidente Rafael Correa, se mostró optimista ante sus seguidores, afirmando que su campaña continúa creciendo en votos y que las provincias restantes por escrutar, consideradas bastiones de su movimiento, consolidarán su victoria. “Estamos casi en un empate técnico, pero con tendencia favorable”, expresó González con una sonrisa ante sus simpatizantes.
Por su parte, Daniel Noboa, quien asumió la Presidencia en 2023 y busca la reelección, optó por mantener el silencio durante la jornada electoral. Aunque su equipo de campaña celebraba inicialmente lo que parecía una victoria en primera vuelta, los datos oficiales redujeron sus posibilidades, llevando a sus seguidores a la expectativa de la segunda vuelta.
Seguridad, economía y violencia: los retos para el próximo presidente
Independientemente de quién gane el balotaje, el nuevo presidente enfrentará retos urgentes. La inseguridad ciudadana, el narcotráfico y las crecientes tasas de homicidios y extorsiones figuran entre las principales preocupaciones de los ecuatorianos.
Desde hace cuatro años, Ecuador ha experimentado un alarmante aumento en la violencia generada por bandas delictivas con vínculos internacionales. Tanto Noboa como González han prometido medidas contundentes para frenar esta espiral, aunque sus enfoques difieren.
En el ámbito económico, la recuperación postpandemia y el fortalecimiento de las finanzas públicas serán otras prioridades. Noboa ha apostado por políticas de apertura económica y cooperación internacional, mientras que González defiende una agenda social más enfocada en reducir la desigualdad.
Un país polarizado entre derecha e izquierda
La segunda vuelta electoral reflejará la división ideológica del país. Daniel Noboa, empresario y político de derecha, ha buscado posicionarse como un líder pragmático y cercano al estilo de mandatarios como Nayib Bukele, pero evitando reformas constitucionales polémicas.
Por otro lado, Luisa González representa el regreso del correísmo, un movimiento político que aún genera debates intensos en Ecuador. Aunque cuenta con una base sólida de apoyo, su postura hacia temas como la relación con Venezuela y el manejo de la economía ha generado críticas de sus opositores.
Camino a la segunda vuelta
Con la segunda vuelta en el horizonte, ambas campañas intensificarán sus esfuerzos para captar votos de quienes apoyaron a los otros 14 candidatos en la primera ronda. Además, el Consejo Nacional Electoral (CNE) ya prepara el proceso logístico para garantizar un balotaje transparente y ordenado.
La jornada electoral del 13 de abril no solo definirá al próximo presidente de Ecuador, sino también la dirección que tomará el país en medio de un panorama político y social complejo. Mientras tanto, la atención se centra en los movimientos estratégicos de Noboa y González para conquistar el apoyo de los votantes indecisos.
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