La adquisición de la startup de codificación Windsurf por parte de OpenAI ha provocado una crisis con Microsoft, su principal socio tecnológico. La compañía dirigida por Sam Altman intenta impedir que Microsoft acceda a la propiedad intelectual de su nueva filial, según informó Barron’s, lo que marca un punto de inflexión en una relación que ha sido clave en el auge de la inteligencia artificial.
Posible denuncia por prácticas anticompetitivas
OpenAI evalúa llevar a Microsoft ante las autoridades regulatorias por presuntas prácticas anticompetitivas. La empresa ha debatido internamente si solicitar una revisión federal de su acuerdo con Microsoft, incluyendo posibles acciones legales, según fuentes citadas por The Wall Street Journal.
Este movimiento coincide con las negociaciones en curso para convertir a OpenAI en una corporación de beneficio público, un cambio que podría disminuir la influencia de Microsoft en sus decisiones estratégicas.
Una alianza marcada por miles de millones
Desde 2019, Microsoft ha invertido unos 13.000 millones de dólares en OpenAI. Aunque no posee acciones directas, sí tiene derechos exclusivos para comercializar sus herramientas de software a través de la nube Azure y mantiene acceso prioritario a sus avances tecnológicos.
Además, Microsoft es el principal proveedor de capacidad informática para OpenAI, aunque esta ha comenzado a desarrollar su propio centro de datos —Stargate— para reducir esa dependencia.
Conflicto por la reestructuración corporativa
Uno de los principales puntos de fricción es el papel que jugará Microsoft en la futura estructura accionaria de OpenAI. Según personas cercanas a las negociaciones, Microsoft exige una participación mayor a la que OpenAI está dispuesta a otorgar.
La urgencia de resolver el conflicto es crítica: si la reestructuración no se concreta antes de fin de año, OpenAI podría perder hasta 20.000 millones de dólares en financiamiento.
SoftBank y la carrera por más independencia
La presión financiera se acentúa con la inversión planificada de 30.000 millones de dólares de SoftBank, que valora a OpenAI en 300.000 millones. Para viabilizar esta operación, OpenAI ha comenzado a diversificar sus proveedores tecnológicos, firmando acuerdos con Oracle y CoreWeave.
Un entorno regulatorio cada vez más hostil
La Comisión Federal de Comercio (FTC) investiga desde 2024 la inversión de Microsoft en OpenAI, dentro de una revisión más amplia de posibles conductas anticompetitivas en el sector tecnológico. Esta indagación pone en el centro del debate la concentración de poder en torno a empresas como Microsoft.
Competencia directa y modelos rivales
Microsoft ha comenzado a desarrollar sus propias herramientas de inteligencia artificial, como GitHub Copilot, que compiten directamente con los productos de OpenAI. La compra de Windsurf y el interés por sus modelos de codificación agudizan esa competencia.
Pese a los roces, ambas compañías aseguran mantener una “asociación productiva y a largo plazo”, aunque las tensiones internas revelan desacuerdos estructurales.
El debate por la inteligencia artificial general
Otro punto de conflicto gira en torno a la inteligencia artificial general (AGI). Mientras algunos ejecutivos creen que está cerca de lograrse, otros la ven aún lejana. Microsoft busca asegurar el acceso a los desarrollos de OpenAI incluso si esta declara haber alcanzado ese hito, lo cual pondría fin al acuerdo actual.
Nuevas alianzas y diversificación de ingresos
OpenAI ha sellado acuerdos con medios como News Corp —matriz de The Wall Street Journal—, en un intento por diversificar sus fuentes de ingresos y reforzar su posición en un mercado cada vez más competitivo y sujeto a regulaciones crecientes.
Caída en bolsa y presión por definiciones
Las acciones de Microsoft cayeron un 0,7% tras conocerse las tensiones. La incertidumbre sobre la continuidad del acuerdo preocupa a los inversores, mientras las partes siguen negociando bajo presión.
La resolución de este conflicto podría redefinir el futuro de la inteligencia artificial, su gobernanza y el acceso global a sus desarrollos más avanzados.
Fuente: Infobae
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