La protección de mujeres migrantes en la frontera entre Colombia y Ecuador se ha convertido en una prioridad estratégica ante el aumento de riesgos. A través del proyecto “Proteger a las caminantes”, liderado por ONU Mujeres y financiado por la Agencia Suiza para el Desarrollo y la Cooperación (COSUDE), se busca mitigar la violencia contra mujeres en movilidad. Este esfuerzo binacional tiene como eje principal el combate a la trata de personas, considerada una grave violación a los derechos humanos y una forma contemporánea de esclavitud.
Mujeres migrantes: en situación de extrema vulnerabilidad
La protección de mujeres migrantes en la frontera se vuelve crítica ante el constante tránsito hacia el sur del continente. Las mujeres y niñas que cruzan entre Colombia y Ecuador enfrentan amenazas como explotación sexual, tráfico de personas y violencia sistemática. Esta situación demanda respuestas institucionales coordinadas y sensibles a las necesidades específicas de las personas migrantes en contexto de movilidad.
El Alto Comisionado de las Naciones Unidas ha calificado la trata de personas como una esclavitud moderna, afectando a millones globalmente. Por ello, la protección de mujeres migrantes en la frontera debe incluir acciones preventivas, educativas y jurídicas sostenidas.
Encuentro binacional y estrategias regionales
Uno de los pilares del proyecto fue el desarrollo de un encuentro binacional en el que participaron autoridades de Colombia y Ecuador. Estas jornadas incluyeron mesas colaborativas, exposiciones magistrales y sesiones de trabajo interinstitucional. El objetivo fue identificar desafíos comunes y compartir buenas prácticas para mejorar la protección de mujeres migrantes en la frontera.
Entre los participantes se encontraban Migración Colombia, la UNODC, ministerios del Interior y de Relaciones Exteriores, fiscales y unidades especializadas. Jairo Otero, director regional de Migración Colombia, enfatizó que el enfoque preventivo y educativo es vital para salvar vidas y proteger derechos fundamentales.
Fortalecer rutas institucionales y mecanismos de respuesta
La iniciativa contempla la implementación del Sistema Binacional de Referencia y de la Ruta Binacional de Protección y Asistencia a Víctimas. También se trabaja en el ajuste de un formulario de seguimiento de casos, que permitirá mejorar la protección de mujeres migrantes en la frontera con un enfoque centrado en los derechos humanos y la equidad de género.
Vanessa Almeida, funcionaria del Ministerio del Interior de Ecuador, subrayó la importancia de fortalecer la coordinación bilateral. Según señaló, las mujeres y niñas siguen siendo las principales víctimas, y contar con rutas institucionalizadas es clave para brindar una respuesta efectiva.
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