Cerca de 200 militares llegaron recientemente a las provincias de Esmeraldas y Santo Domingo de los Tsáchilas. Su misión es fortalecer las tareas de seguridad y patrullajes en estas zonas. Este contingente se une a las fuerzas locales con el objetivo de garantizar la protección de la población y mantener el orden público.
Refuerzo militar y entrega de vigilancia
Los soldados asignados al Centro de Rehabilitación Social de Santo Domingo entregaron la custodia del lugar a la Policía. Con esta medida, las fuerzas de seguridad locales podrán enfocarse en otras tareas de control y prevención. El grupo está conformado por 163 integrantes de la Fuerza Terrestre, recién graduados de la Escuela Militar Eloy Alfaro y de la Formación de Soldados de la Fuerza Terrestre (Esforse).
Distribución de las tropas
En Santo Domingo, 45 soldados y un subteniente fueron asignados al Batallón de Infantería Libertadores 35. Estos efectivos recibirán capacitación en combate urbano y en adaptación al territorio. El objetivo es garantizar operaciones más efectivas en la región. Además, participarán en patrullajes y actividades de vigilancia en Santo Domingo, La Concordia y Quinindé.

Operaciones en centros de rehabilitación
Por un lado, los militares continuarán con operaciones e intervenciones en el Centro de Privados de Libertad Bellavista de Santo Domingo. Asimismo, la vigilancia que antes estaba a cargo de los militares fue entregada a la Policía. Esta medida asegura un control más eficiente del reclusorio y contribuye a reducir la delincuencia organizada.
Resultados y patrullajes estratégicos
De igual manera, según Jorge Benítez, comandante del Batallón 13 Pichincha, la colaboración con el Bloque de Seguridad ha permitido detener a cabecillas e integrantes de grupos delictivos. Además, las patrullas se mantienen activas en vías alternas como La Aurora y La Merced. Estas rutas suelen ser utilizadas por delincuentes como vías de escape.
Presencia militar en Esmeraldas
En Esmeraldas, cuatro subtenientes y 113 soldados se integran al Batallón de Infantería nº 13. Ellos están listos para reforzar la seguridad en la frontera norte. Tras completar su entrenamiento, se sumarán a las tareas de patrullaje y protección ciudadana. Con esta acción se busca fortalecer la estabilidad y la seguridad en la provincia, según explicó Juan Carlos Arias, comandante de esta unidad militar.
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