Contexto de la nueva consulta popular
El presidente Daniel Noboa impulsa una consulta popular y referendo que busca concretarse antes de diciembre de este año. La propuesta agrupa temas planteados en distintas coyunturas políticas desde septiembre pasado. Sin embargo, las preguntas incluyen asuntos muy distintos entre sí, que el mandatario considera «de interés popular y de urgencia de cambio».
El objetivo, según las publicaciones del Gobierno, es «enterrar el pasado y abrazar un futuro de paz y desarrollo». Sin embargo, varios analistas cuestionan si realmente estas medidas mejorarán la vida diaria de los ciudadanos o si solo buscan legitimación política.
La crítica de los expertos
Mauricio Alarcón, de la Fundación Ciudadanía y Desarrollo (FCD), señala que las consultas populares históricamente no han resuelto problemas reales, sino que han servido para fortalecer la popularidad de los presidentes. Ejemplos recientes, como la consulta de agosto de 2023 sobre el Yasuní ITT, muestran que muchas decisiones aprobadas en referendos no se cumplen.
Alarcón también advierte sobre la comunicación del Gobierno, que asocia todas las preguntas con la inseguridad y la crisis económica. Temas como la reducción de legisladores o la eliminación del Consejo de Participación son presentados como medidas de seguridad, pero no impactan directamente en la vida cotidiana de la población.

Limitaciones de las propuestas
Karen Sichel, analista política, considera que aunque algunos temas son relevantes, el Gobierno no ofrece soluciones estructurales. Por ejemplo, la eliminación del Consejo de Participación no establece un sistema de reemplazo sólido y solo transfiere responsabilidades a la Asamblea Nacional.
En cuanto a la reducción de legisladores o la cooperación con bases militares extranjeras, Sichel afirma que no existen parámetros claros que garanticen eficacia o proporcionalidad. Asimismo, el financiamiento de organizaciones políticas no resuelve la desigualdad entre partidos grandes y pequeños, limitando la participación democrática efectiva.
Riesgos políticos y sociales
Santiago Basabe, catedrático y analista, señala que muchas preguntas buscan consolidar el poder del Gobierno, garantizando mayor control en la Corte Constitucional y la Asamblea, así como limitar fondos a ciertos partidos. Según Basabe, estos cambios podrían incluso facilitar financiamiento ilegal, mientras que la seguridad se utiliza como narrativa de legitimación.
Temas que sí podrían ser relevantes
Alarcón reconoce que algunas consultas pueden tener valor real, como las reformas parciales a la Constitución sobre bases militares extranjeras y financiamiento de organizaciones políticas, ya discutidas en la Asamblea. No obstante, advierte que otras preguntas parecen responder más a intereses personales o políticos que al bienestar ciudadano.
Conclusión
Aunque la consulta popular de Daniel Noboa incluye temas de interés, expertos coinciden en que muchas preguntas buscan consolidar poder político más que resolver problemas estructurales de la ciudadanía. La decisión en las urnas podría definir no solo el rumbo de las reformas, sino también la percepción sobre la eficacia del mecanismo de participación en Ecuador.
Más noticias:
Fuente: