En septiembre, el nivel de agua en el embalse Mazar, ubicado en Azuay, debería estar en 2.153 metros sobre el nivel del mar (msnm). Sin embargo, actualmente se encuentra en 2.131 msnm, aumentando el riesgo de cortes de luz en el país. La crisis eléctrica en Ecuador se agudiza y el sistema se vuelve cada vez más vulnerable, lo que podría llevar a nuevos racionamientos de energía para el resto del año.
Situación Crítica del Embalse Mazar
Descenso Alarmante del Nivel de Agua
El embalse Mazar, uno de los mayores reservorios de energía del país, ha visto una caída preocupante en su nivel de agua. En lo que va de septiembre de 2024, el embalse ha perdido casi un metro de agua al día, lo que pone en riesgo la operatividad de la central hidroeléctrica. Diego Morales, presidente del Colegio de Ingenieros Eléctricos de Azuay, advierte que si esta tendencia continúa, el embalse podría alcanzar el nivel crítico de 2.115 msnm en aproximadamente 17 días.
El descenso del nivel de agua del embalse Mazar es un reflejo de la crisis energética en Ecuador. El 24 de octubre de 2023, el nivel de agua del embalse cayó a 2.120 msnm, lo que llevó a la implementación de racionamientos de luz. Morales indica que, si el nivel de agua sigue bajando, podrían ocurrir daños significativos en las turbinas debido a la entrada de sedimentos, lo que podría afectar aún más el suministro de energía.
Impacto en la Producción de Energía
El embalse Mazar forma parte de un complejo de tres centrales hidroeléctricas ubicadas en el sur del país: Mazar, Paute-Molino y Sopladora. Juntas, estas plantas generan aproximadamente 1.756 megavatios, casi el 38% de la demanda nacional. La caída en el nivel de agua del embalse Mazar compromete la capacidad de estas centrales para abastecer al país. El caudal de entrada en la hidroeléctrica Mazar ha registrado su nivel más bajo histórico, con solo 15,4 metros cúbicos por segundo el 8 de septiembre de 2024, comparado con un promedio histórico de 21,70 metros cúbicos por segundo entre 1983 y 2011.
Medidas y Desafíos en la Crisis Energética
Dependencia de la Barcaza Turca
Para enfrentar la crisis, Ecuador ha contratado una barcaza de generación eléctrica turca, que costó al país USD 114 millones. Esta barcaza, proporcionada por la empresa Karpowership, solo aportará 100 megavatios, lo que representa el 10% del déficit actual de 1.080 megavatios, sin contar con las importaciones de Colombia. La barcaza entrará en operación el 13 de septiembre de 2024, según lo anunciado por el gobierno de Daniel Noboa. Sin embargo, según Diego Morales, esta medida no resolverá por completo la crisis.
Reducción en Importaciones de Energía
Ecuador también ha visto una reducción en las importaciones de energía desde Colombia debido a restricciones impuestas por el país vecino debido a su propio estiaje. La importación de energía desde Colombia cayó de 449 megavatios el 15 de agosto a 382 megavatios el 8 de septiembre. Esto subraya la necesidad urgente de que el gobierno acelere la contratación de energía de emergencia y recupere las termoeléctricas, además de negociar con Colombia para asegurar el máximo de capacidad exportable.
Perspectivas y Futuro
Racionamientos de Energía y Causas
Desde el inicio de la crisis eléctrica en octubre de 2023, Ecuador ha enfrentado niveles críticos en el embalse Mazar, lo que ha llevado a la implementación de racionamientos de luz programados. La situación se agravó el 12 de abril de 2024, cuando el nivel de agua en Mazar cayó a 2.114 msnm, lo que provocó un nuevo período de racionamientos hasta mayo de 2024. Además, bajo el gobierno de Daniel Noboa, se han producido dos apagones nacionales, el 19 de junio y el 7 de septiembre de 2024.
La crisis eléctrica en Ecuador requiere acciones urgentes y coordinadas para mitigar el impacto en la vida cotidiana de los ciudadanos y garantizar la estabilidad del suministro de energía.
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