El gremio empresarial de la Cámara de la Pequeña y Mediana Empresa de Pichincha (Capeipi) ha presentado una innovadora propuesta para enfrentar la crisis energética que afecta al sector productivo ecuatoriano. La iniciativa, enviada al Presidente Daniel Noboa el 26 de septiembre de 2024, busca gestionar de manera más eficiente la demanda de electricidad y reducir las pérdidas económicas que se han visto agravadas por los cortes de energía.
Propuesta de jornadas laborales de cuatro días
Francisco Vergara, presidente de Capeipi, explicó que la propuesta consiste en implementar una jornada laboral de diez horas diarias durante cuatro días a la semana. Esta nueva estructura busca dividir el sector productivo en dos grupos de trabajo. Uno de ellos laboraría de lunes a jueves y el otro de jueves a domingo. De este modo, se garantiza una operación continua sin sobrecargar la demanda de energía en momentos críticos.
Las jornadas estarían comprendidas entre las 07h00 y las 17h00, y el jueves sería el único día en que ambos grupos coincidirían en la operación. Para ese día, el gremio empresarial ha solicitado que el parque generador y los embalses de energía estén preparados para satisfacer el 100% de la demanda.
Reducción de pérdidas en el sector productivo
Durante una entrevista con Teleamazonas, Vergara destacó que las pérdidas para el sector, debido a los cortes de electricidad, ascienden a un promedio de 8 mil remuneraciones por hora de interrupción. Esta problemática ha llevado a la Capeipi a buscar alternativas que permitan mitigar los efectos negativos de la crisis energética sin sacrificar la productividad.
El gremio empresarial asegura que la implementación de estas jornadas ayudaría a reducir el impacto económico de los cortes, ya que dividiría el uso de la electricidad de manera más equilibrada durante la semana, optimizando los recursos y las capacidades del sistema eléctrico.
Ajustes según las concesiones eléctricas
Otro aspecto relevante de la propuesta es que la división de los grupos de trabajo deberá estar alineada con el área de concesión de las empresas distribuidoras de energía eléctrica. Esto garantizaría una mejor coordinación entre las empresas y el sistema eléctrico nacional, permitiendo a las industrias planificar su producción con mayor previsión y adaptarse a los momentos en los que la energía esté disponible.
Impacto esperado
De implementarse esta propuesta, no solo se aliviaría la presión sobre la demanda de electricidad, sino que también se evitarían paradas productivas inesperadas, que hasta el momento han generado un gran costo para las pequeñas y medianas empresas. Según los cálculos de Capeipi, esta medida contribuiría a estabilizar la productividad en los sectores más vulnerables a los cortes de energía, y proporcionaría una solución temporal hasta que el sistema energético del país se estabilice por completo.
La crisis energética en Ecuador ha afectado significativamente al sector productivo, especialmente a las pequeñas y medianas empresas. La propuesta de Capeipi de implementar una jornada laboral de cuatro días con diez horas diarias busca mitigar el impacto de los cortes de electricidad, garantizando una operación más eficiente. Si bien la iniciativa aún está en manos del gobierno, su implementación podría marcar una diferencia clave en la forma en que el país gestiona su crisis energética.
Te puede interesar:
Economía de Ecuador cae 2,2% en el segundo trimestre de 2024, según el BCE