La reciente derogatoria del reglamento sobre la salida de menores del país generó un amplio debate técnico y social. Aunque la normativa buscaba prevenir migraciones riesgosas, su aplicación provocó resistencia considerable entre usuarios y notarios debido a exigencias percibidas como invasivas y poco operativas. Además, el Consejo de la Judicatura (CJ) reconoció que el proceso careció de una socialización adecuada, lo que incrementó la complejidad del trámite.
Contexto de la salida de menores del país y la decisión del CJ
El 29 de octubre de 2025, el CJ dejó sin efecto la Resolución 063-2025. Esta disposición regulaba la salida de menores del país mediante un procedimiento más estricto. Sin embargo, la entidad admitió complicaciones migratorias que impedían su correcta implementación. Entre los requisitos eliminados estaban formularios autorizados, entrevistas obligatorias, toma de huellas dactilares, fotografías de comparecientes y entrega duplicada de testimonios notariales.
A pesar de esta derogatoria, se mantiene la obligación legal de suscribir un acta notarial firmada por ambos progenitores o por uno de ellos cuando corresponda. Este documento habilita la salida de menores del país en casos de viajes solos o con terceros.
Reacciones notariales ante el reglamento derogado
El notario Paúl Arellano explicó que los padres deben presentarse en la notaría acreditando su calidad de progenitores. Consideró útil el uso de formularios por su carácter estandarizador. Sin ellos, vuelve a ser necesaria la presentación de una minuta convencional para la autorización de la salida de menores del país.
Arellano señaló que la inclusión de huellas y fotografías generó rechazo entre usuarios, quienes percibieron vulneraciones a la intimidad. Además, notarios manifestaron preocupación por la incorporación de sus propias imágenes en documentos públicos. Esta exigencia tampoco constaba en la Ley Notarial ni en el Código de la Niñez y Adolescencia, por lo que no podía imponerse mediante un reglamento administrativo.
Argumentos a favor del reglamento de salida de menores del país
Yolanda Yupangui, exvocal del CJ, defendió la propuesta. Aseguró que se trabajó con Migración, Fiscalía y especialistas en trata de personas para estructurar un procedimiento más seguro. Reconoció que exigía mayor esfuerzo operativo, pero sostuvo que el objetivo era proteger a niños y adolescentes en situación vulnerable, evitando riesgos asociados a la salida de menores del país sin controles adecuados.
Asimismo, recordó que la normativa surgió por solicitud de la Unidad de Trata de Personas y no como iniciativa autónoma del CJ. Afirmó que buscaba viabilizar medidas preventivas sin contradecir la ley, considerando el principio constitucional del interés superior del niño.
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