Con gran entusiasmo, se ha llevado a cabo la prueba de bombeo del sistema de riego Manzanilla, ubicado en el cantón Pucará, provincia de Azuay. Este proyecto, destinado a mejorar el suministro de agua para la agricultura, beneficiará a más de 200 habitantes de la comunidad y representa un paso clave hacia el fortalecimiento del desarrollo agrícola local.
Un proyecto que cambia vidas
La prueba de bombeo del sistema de riego Manzanilla es un hito para los agricultores de la zona. Gracias a la explotación de agua subterránea a través de un pozo profundo, se ha logrado incrementar el caudal de agua disponible, alcanzando los 4,00 litros por segundo. Esta cantidad permitirá regar alrededor de 20 hectáreas de cultivos, lo que mejorará significativamente la productividad agrícola, especialmente de hortalizas, y elevará la calidad de vida de los habitantes.
El prefecto de Azuay, Jota Lloret Valdivieso, junto a la viceprefecta, Alexandra Quintanilla Zamora, y el alcalde de Pucará, Adrián Berrezueta, lideraron este importante evento, que contó también con la participación activa de los beneficiarios del proyecto.
Aporte tripartito: Una alianza para el progreso
Este proyecto de riego es el resultado de una colaboración tripartita entre la Prefectura de Azuay, el Municipio de Pucará y la junta de riego Manzanilla. La inversión total asciende a 23.300 dólares, distribuidos de la siguiente manera: la Prefectura aportó 21.000 dólares, el Municipio contribuyó con 800 dólares, y la junta de riego Manzanilla sumó 1.500 dólares.
Esta inversión conjunta no solo asegura la sostenibilidad del proyecto, sino que también demuestra el compromiso de las autoridades locales y provinciales en el desarrollo agrícola de la región. La cooperación entre estas entidades es fundamental para garantizar que las comunidades rurales puedan acceder a los recursos necesarios para mejorar sus condiciones de vida.
Beneficios para la comunidad de Manzanilla
El impacto del sistema de riego Manzanilla va más allá de los beneficios inmediatos para la agricultura. El acceso a un suministro constante de agua de calidad permitirá a los agricultores aumentar su producción y mejorar la variedad de cultivos. Este proyecto asegura la sostenibilidad agrícola, reduciendo la dependencia de las lluvias estacionales y mejorando la resiliencia ante el cambio climático.
Además, el éxito de la prueba de bombeo es un ejemplo de cómo las comunidades rurales pueden avanzar hacia un desarrollo más sostenible y equilibrado, mejorando tanto la producción agrícola como la seguridad alimentaria local.
Perspectivas futuras
El prefecto Jota Lloret destacó que este tipo de proyectos son esenciales para impulsar el progreso en las zonas rurales. La inversión en infraestructura de riego no solo aumenta la productividad agrícola, sino que también fomenta el arraigo de la población, disminuyendo la migración hacia las ciudades.
El alcalde de Pucará, Adrián Berrezueta, también enfatizó la importancia de continuar trabajando en proyectos similares que permitan a los agricultores locales mejorar sus capacidades productivas y acceder a mercados más amplios, asegurando así un desarrollo sostenible a largo plazo.
La prueba de aprovechamiento de agua subterránea en el pozo profundo de Manzanilla ha sido un éxito rotundo. Con una inversión conjunta de más de 23.000 dólares y la participación activa de la comunidad, este proyecto de riego no solo beneficiará a más de 200 personas, sino que también contribuirá al crecimiento económico y social de la región. Este es un claro ejemplo de cómo la colaboración entre instituciones públicas y la comunidad puede generar soluciones sostenibles y mejorar la vida de las personas.
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