Ford Motor Company ha presentado una solicitud de patente para una tecnología que podría generar controversia en términos de privacidad y seguridad. La solicitud, que tiene como objetivo registrar una innovación tecnológica, permitiría a los vehículos de la marca escuchar las conversaciones de los ocupantes para luego mostrar anuncios dirigidos. Este sistema, denominado «presentación de anuncios en el vehículo», fue inicialmente presentado en febrero y publicado a finales de agosto, lo que ha generado diversas reacciones.
¿Cómo funcionaría el sistema?
El sistema propuesto por Ford sería capaz de realizar varias funciones clave. En primer lugar, determinaría la ubicación exacta del automóvil, la velocidad a la que circula y el tipo de carretera por la que transita. Además, podría predecir rutas, velocidades y destinos basados en las conversaciones de los ocupantes. Para ello, monitorearía y analizaría los diálogos dentro del vehículo, identificando palabras clave o frases que pudieran revelar las intenciones o destinos de los pasajeros. Posteriormente, extraería y analizaría las señales de audio captadas, utilizando datos históricos para seleccionar anuncios personalizados. Finalmente, estos anuncios se mostrarían de manera auditiva o visual a través de la interfaz humano-máquina (HMI) del vehículo.
El principal objetivo de Ford con esta tecnología es maximizar las oportunidades de monetización mediante la publicidad dirigida, brindando así anuncios más relevantes y personalizados para quienes viajan en el vehículo.
Preocupaciones sobre privacidad y seguridad
A pesar de su potencial, esta propuesta ha generado preocupaciones entre expertos en privacidad y seguridad. Entre los puntos críticos señalados, se destaca la falta de especificación sobre cómo se protegerán los datos recopilados. Además, se advierte sobre el riesgo de un uso indebido de la información personal y las conversaciones privadas. También existe preocupación por el hecho de que los anuncios podrían distraer a los conductores, lo cual incrementaría el riesgo de accidentes.
Frente a estas preocupaciones, Ford ha defendido su solicitud, argumentando que presentar patentes es una práctica común para proteger nuevas ideas. Asimismo, aclaran que las ideas descritas en una patente no siempre representan planes inmediatos de negocio o de productos. No obstante, la compañía ha estado involucrada en otras controversias similares, como con una tecnología diseñada para enviar información a la policía sobre la velocidad de vehículos cercanos, o un sistema que permitiría que los vehículos se «autosecuentren» si los propietarios no cumplen con los pagos a tiempo.
El debate sobre los límites éticos y legales de tecnologías como esta seguramente continuará. Mientras Ford busca proteger sus innovaciones, deberá también enfrentar las posibles regulaciones que podrían surgir en respuesta a estas formas de publicidad invasiva.
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